La pandemia ha traído consigo cambios en gran parte de la forma de organizarnos y producir a nivel mundial. En este sentido, el mundo comercial global se enfrenta a una nueva crisis que pone entre dicho la forma de consumir. Por ello las empresas están optando por nuevas opciones.
La pandemia por COVID-19 sólo aceleró que las empresas comenzarán a replantearse nuevas formas de seguir produciendo. El reshoring o también conocido como backshoring, es una tendencia en el mundo económico.
El reshoring consta de que toda empresa que tenía sus procesos de producción fuera del país originario, traiga de regreso al país dichos procesos. Haciendo así que se relocalice en el país todo el proceso de creación de productos.
Actualidad: Estados Unidos
Si bien la guerra comercial entre Estados Unidos y China ha sido un factor para que los norteamericanos consideren como una posibilidad relocalizar todas sus empresas que se encontraban en países en vías de desarrollo como China, Vietnam y otro más.
Estados Unidos de América vio en el reshoring una posibilidad desde el año 2017 cuando el entonces actual presidente Donald Trump anunciara que se decidiría incentivar la producción nacional.
Después de 2 años y corriendo de una pandemia, para Estado Unidos la era global en donde poder tener los procesos de producción fuera de casa era la elección viable por ser baratos a costo de envíos un poco elevados, está permitiendo que las empresas se transformen y generen nuevas formas de salir de la crisis económica.
Al hacer reshoring, las empresas norteamericanas a parte de no generar gastos elevados por el traslado de mercancías en épocas de covid, relocalizar a las empresas dentro del país, también está generando que las y los ciudadanos tengan la posibilidad de conseguir empleos más remunerados.
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